Salud en el debate electoral

Salud

Muchas personas me preguntan ¿qué pasa en el sector salud que la gente la seduce la propuesta del pacto histórico? 

Mi respuesta es sencilla: no conocieron el sistema de salud anterior bajo el cual nos formamos muchos de mi generación.

Las nuevas generaciones no saben lo que son las penurias en salud.

La asistencia en salud era un privilegio para muy pocos. Los presupuestos no llegaban a septiembre. Generalmente había que “rogar” una apropiación presupuestal para pagar nominas y proveedores. Los hospitales no funcionaban o vivían de la caridad. Hoy son derechos adquiridos. 

¿el sistema actual de salud es perfecto? No. Pero está cerca de ser el mejor del mundo. Hay que mejorarlo. Mejorar las condiciones para el recurso humano, infraestructura y la calidad en la atención. Y esto se ha venido consiguiendo cuando se le dieron “garras” a la Supersalud. Quitarle la chequera a algunos actores del sistema y articular a los aseguradores y prestadores.

Pero sin la contribución, complementariedad, subsidiaridad, solidaridad, universalidad y otras virtudes del sistema, el volver al pasado sería negarle la salud a los que no tienen nada.

Así de sencillo.